A woman examining her face in a mirror. A woman examining her face in a mirror.

Cómo cuidar la piel

Es importante que cuides tu cuerpo. Cuando se trata de cuidar la piel, hay que dedicarle tiempo e invertir. Cuanto antes empieces a tomar decisiones inteligentes y saludables para tu piel, mejor será tu condición a largo plazo. Tanto si practicas una rutina básica como una más compleja, mantener una piel sana merece la pena a largo plazo.

A woman reaching for a skincare product.

Una rutina básica de cuidado de la piel implica tres pasos clave:

1. Limpieza: Dos veces al día, especialmente antes de acostarte, utiliza un limpiador adecuado para tu tipo de piel (libre de aceites si tienes piel grasa, con activos hidratantes si tienes la piel seca) para eliminar las impurezas que el agua por sí sola no puede retirar. Esto prepara la piel para recibir otros productos.

2. Exfoliación: Elimina las células muertas de la piel que pueden causar acné, opacidad y arrugas. Sigue las instrucciones del producto respecto a la frecuencia de uso.

3. Humectación: Todos los tipos de piel necesitan humectación. Utiliza una fórmula sin aceite si tienes piel grasa o mixta. Durante el día, elige una crema humectante con FPS para protegerte del sol. Por la noche, aplica una crema de noche más rica y un producto específico para el contorno de ojos, diseñado para esa zona delicada.

Una rutina avanzada de cuidado de la piel incorpora tratamientos específicos a la rutina básica:

1. Tónico: Tras la limpieza, aplica un tónico para suavizar, calmar y preparar la piel para los siguientes pasos. Elige tónicos sin alcohol si tienes la piel sensible o propensa a las arrugas. Los tónicos especializados pueden tratar problemas como el acné o el envejecimiento.

2. Sérums y tratamientos específicos: Después de exfoliar y antes de hidratar, aplica sérums o cremas que traten problemas específicos (acné, antienvejecimiento). Aplica los productos en capas: primero los más ligeros (sérums) y luego los más densos (cremas).

3. Mascarillas: Utiliza mascarillas semanalmente o cuando sea necesario para proporcionar un tratamiento intensivo a diversos problemas como el acné, la sequedad o las manchas oscuras. Estos productos suelen secarse sobre la piel, eliminando las impurezas y aportando humectación.

4. Mascarillas de tejido: Usa mascarillas de tejido para una dosis concentrada de sérum semanalmente o según las indicaciones. Crean un efecto oclusivo que facilita la penetración profunda de los ingredientes; lo ideal es usarlas por la noche, seguidas de una crema humectante.

5. Aguas limpiadoras: Estos limpiadores sin enjuague eliminan eficazmente el maquillaje y las impurezas, por lo que son adecuados para todo tipo de piel.

6. Tratamientos para manchas oscuras: Trata las manchas oscuras con sérums, mascarillas o cremas especializados que puedes usar como parte de tu rutina nocturna o como tratamientos semanales.

Una rutina de cuidado de la piel constante y eficaz produce mejoras notables y a largo plazo en la salud y el aspecto de tu piel.